Señoras, no queda nada bien ir acicalándose en el metro. Hay quien no encuentra mal retocarse los labios, yo a veces lo hago, pero una cosa es girarse un poco y frente a un espejo repasar lo anterior con la barra labial, lo que veo aceptable y otra diferente untarse con gloss rosa chicle dejandote un pegote mientras miras al que se ha sentado delante. Y no os deis así de alegremente en un vagón que se mueve mucho los potingues, las sombras (así, a dedazo, fino fino) y la máscara de pestañas. Aunque es de agradecer que se haya ido el verano y con él las señoras en chancletas que se dan crema en los pies.
Ya. Queja tonta del día realizada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario